¡Sí, caballeros medievales! No ha resultado fácil conseguirlo, pero al final lo logramos.
Y todo ello gracias a la aventura que hemos vivido en Sepúlveda.
Cuando hemos llegado, tres damas medievales nos esperaban para enseñarnos los secretos y la historia de esta villa segoviana...
Junto a ellas, iniciamos el recorrido por diversas calles de la villa
El la plaza conocimos el origen de la Villa y la importancia del Conde Fernán González. También aprendimos qué son los Fueros y quién es la Holgazana. Sí, así se llama a la campana que se encuentra en la espadaña del Castillo y que cada día da treinta y tres toques como lo hacía ya en la Edad Media para anunciar el cierre de las siete puertas de su muralla que daban acceso al interior de la villa.
Después llegamos a la Puerta del Ecce Homo y conocimos el sistema de defensa de la ciudad. Tras pasarla como si asaltáramos la villa, realizamos nuevas pruebas.
Y ascendimos hasta lo más alto de la villa donde se encuentra la iglesia románica de San Salvador.
En este lugar descubrimos cómo se construían las iglesias, cuáles eran sus herramientas y encontramos algunas marcas que hacían los canteros para conocer cuales eran las piedras que habían labrado.
Y Tras superar todas las pruebas... ¡Fuimos armados caballeros!
Y hasta Happy y Dream fueron nombrados caballeros....
Y aquí estamos todos. Los nuevos Caballeros de Sepúlveda...
Más tarde, y una vez nombrados caballeros, visitamos la Casa del Parque de las Hoces del Duratón, donde aprendimos muuuuchas cosas. Y hasta nos llevamos un pequeño susto. ¡Qué bromista era "Serguei".
Cuando finalizamos la visita a la Casa del Parque... ¡de regreso al autobús!
¡Ha sido un día genial!
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